Saboreo Food&drink - Valladolid

Pedimos varias cosas para picar, pero la mayor parte de ellas no estaban disponibles, cosa que nos decepcionó un poco. Si no hay la mitad de las cosas, deberían quitarse de la carta. Al final pedimos salpicón, que estaba bueno; patatas ali oli, también ricas y dos montaditos uno de solomillo roquefort y otro de rabas, que estaban algo flojitos. De postre pedimos profiteroles y la tarta Romeo y Julieta que esta nos sorprendió gratamente, estaba muy rica. El servicio fue atento y el local está muy bien decorado.

Hemos ido un par de veces y siempre nos hemos encontrado con la misma camarera borde y desagradable de siempre por lo que no volveremos más. Creo que una de las cosas para que te vaya bien un bar a parte de servir buena comida es tener unos camareros agradables y amables y en este sitio eso brilla por su ausencia. La comida es pasable en relación con el precio. Pero si quieres disfrutar de la comida y sentirte a gusto hay bares en la zona mucho mejores.

No te llevan las cosas a la mesa y te llaman de mala manera para que te levantes tu. Los carteles del desayuno pone fuera un precio y en la puerta otro. La gente no es boba por lo que no creo que este etablecimiento tarde mucho en cerrar..

Vimos un cartel en san Pablo en el cual indicaba un precio de desayuno. Tras entrar y pedir el desayuno, en primer lugar ni siquiera nos acercaron las cosas a la mesa, si no que tuvimos que ir nosotros a buscarlas a la barra, y al ir a pagar, nos cobraron un precio superior, mostrándonos otros carteles, donde efectivamente venia un precio superior para el fin de semana. Cuando le indicamos a la camarera el precio que aparecía en el cartel que habíamos visto, lejos de disculparse, nos dijo de malas maneras que mirásemos el otro cartel. En mi humilde opinión, una vez que veo un precio, no tengo por que pensar que en otros lugares del establecimiento vaya a haber carteles indicando un precio diferente, por lo que creo que la responsabilidad era enteramente suya, y lo menos que podía haber hecho es disculparse, como si hizo el responsable del local.

Pfffffff... estar céntrico es su único atractivo. Carta mediocre, sin clara definición de estilo. Todo súper estándar. Patatas bravas más q mediocres. Prescindible