Parador De Guadalupe Restaurante

Fui en familia a pasar un par de días para visitar el monasterio y el pueblo que son preciosos. Está al lado del Monasterio de Guadalupe, el edificio es precioso y está muy bien acondicionado. Los camareros y los de recepción son encantadores. Se come estupendamente en el restaurante, recomiendo el postre de helado de queso de cabra y miel. El patio y el jardín es precioso, la zona de la piscina está bien y hay una sala de estar súper agradable. Recomiendo comer en el restaurante se esté alojado o no, y tener en cuenta que el pueblo está lleno de cuestas y hay bastante empedrado. Las habitaciones, y en realidad todo el parador, tiene mucho encanto.

Espectacular sitio,como siempre Paradores es garantía de calidad ,por su trato acogida ubicaciones,limpieza ,calidad en sus desayunos comidas y cenas ,cuidan hasta el más mínimo detalle,y te sientes tan agusto Disfrutamos mucho en el Parador de Guadalupe Gracias a todo el personal de el Parador

No me gustó, muy básico y además la habitación estaba llena de polvo

Situado a escasos metros de la plaza del pueblo de Guadalupe y obviamente junto al Monasterio de la Virgen de Guadalupe. Habitaciones amplias con techos altos, patio interior abierto y zona de jardín y piscina. El personal de recepción muy atento y colaborador. Abierto desde 1965.

Habitación espaciosa, limpia, colchones cómodos, variedad de almohadas. Parking con tarifa reducida para las motos.