La Botica - Ushuaia

A principios de este mes mi marido y yo estuvimos en Ushuaia. De camino hacia el Paseo del Centenario nos sorprendió una lluvia fría e intensa. Casi empapados descubrimos a lo lejos el cartel de La Botica. Ya había pasado la hora del almuerzo pero entramos buscando refugio y un café. La dueña del lugar nos atendió con una cordialidad difícil de encontrar por estos días; fue amable y muy atenta. Cuando le pedimos la cuenta, nos dijo que no era nada, que nosotros habíamos entrado causa de la lluvia. Como insistimos en pagarle nos hizo un precio especial. Nos despedimos como viejos amigos pero lamentando tener que volver a Buenos Aires al otro día. Sin dudas, si tenemos la dicha de volver a Ushuaia, iremos a comer a La Botica.

Es un pequeño restauran muy confortable y atendido de una manera muy tradicional y educada. Sus platos son deliciosos y abundantes. Las empandas de carne son lo mejor!

Uma delicia de lugar,comidas saborossimas,indico a todos irem e deguustarem essas delicias.Nao Vejo a hora de voltar

De afuera no dice nada, pero entramos y hay una carta bastante amplia, los precios son normales, y la comida exquisita. Comí unos sorrentinos de jyq, muy buenos!

Se voce gosta de apreciar sabores diferentes, nao deixe de ir nessa pizzaria que é bastante diferente das traducionais do Brasil!