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Recenzii
Contribuiți la feedbackHay que recalcar el trato excelente, que a pesar de estar siempre abarrotado (recomiendo reservar con tiempo), siempre están con una sonrisa y buenas formas. En nuestro caso empezamos con una ensaladilla rusa riquísima y con los mejores torreznos que hemos comido en nuestra vida, ¡una maravilla! Tienen probablemente uno de los mejores Cachopos de Madrid, el punto es perfecto. De postre, una filloa con salsa de castaña, toconillo de cielo y su crema de yogur especial que alegra el espíritu. Salimos felices, como siempre.
Comida de amigos para reventar el saldo calórico después de una actividad deportiva. Croquetas finas, quizás demasiado porque para ser de cabrales el sabor estaba muy suave. La fabada muy buena, y aunque el tamaño de la pota llevará a engaño inicial, daba para dos platos buenos, y por último un chuletón que estaba muy bueno, se pagaba pero merecía la pena. Y el postre, un arroz con leche que, aunque tuviera un aire de crema catalana por la cobertura de caramelo caliente, estaba delicioso. Además, el servicio muy atento y agradable, invitando a café y chupito. Y una estrella extra porque tienen un pacharán de verdad, el bueno, con el que se disfruta una sobremesa....y eso con los dedos contados los sitios en Madrid que lo tienen. Un acierto de sitio aunque voy a poner un pero..... Y chorizo a la sidra? Ese clásico para entrante no puede faltar!
La comida está muy buena y bien elaborada, pero el trato al público deja bastante que desear, ya que te hablan regular y tienen muy pocas ganas de que te quedes
Asturiano con toques contemporáneos pero manteniendo la tradición. La comida es espectacular y las sugerencias fuera de carta, un acierto.
El cachopo está increíble. Las croquetas super buenas tanto las de jamón como las de cabrales. Sin duda uno de los mejores asturianos de Madrid