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Contribuiți la feedbackEl restaurante se encuentra en la avda. constitución de declaración, 178 torreta de ardoz (madrid.) no es un lugar de mucho paso y la entrada no invita a pensar en el magnífico restaurante que es en realidad. Cuando bajas por las escaleras, un escudo a la puerta con esta leyenda: después de Dios la casa de O.R y cuando entres, encontrarás un bar a la derecha y una pared a la izquierda con una exposición de botellas de vino de añada y denominaciones significativas, con un montón de corchos apilados arriba en cristalería. También hay pinturas sobre vino y cerveza. uno de ellos llama la atención con el diploma dado a Javier de habla francesa como campeón nacional de franjas de cerveza en 2017. Pronto te das cuenta de que aquí el buen vino es muy importante. en caso de que haya alguna duda, cuando entras en el hall descubres una biblioteca de vinos y cuando pides la carta que compruebas, además del menú y los postres tienen una especial para los vinos que parece un libro. la sala de estar no es muy grande y su decoración es un poco austera ( sería una reforma con un toque más moderno y luminoso.) todavía, es acogedor y tranquilo. éramos tres personas. Pusieron un pipyrana de pescado como aperitivo. como entrantes, pedimos croquetas de boletus con reducción de guijarros ximénez y arcilla crujiente con tuercas de pino y membrillo. como plato principal optamos por melocotón en camarones y salsa de azafrán, carne roja parrillada y carne roja de lomo alto a la parrilla. Acompañamos con un emilio moro 2015. postre, compartimos un pastel de queso y una torrija con helado. Terminamos con cafés y chocolates y regalos de pacharan de la casa. las entradas fueron muy buenas (para destacar la arcilla crujiente), la excelente merluza y las espectaculares carnes y en su punto. buena presentación de platos, servido sin mucha expectativa. los camareros mucho tiempo que todo está fuera de nuestro gusto. Trato exquisito. precio tal vez algo alto pero no es en relación a la calidad de los productos que ofrecen. sin contar el vino, el menú llega a unos 40 € por persona. para los amantes del vino como yo, y si quieres comer bien, O.R es una caja fuerte, muy recomendable.
Excelente comida, así como tratamiento y servicio. Excelente bodega. El único pegamento es que hay demasiadas escaleras y que complica un poco el acceso con coches o sillas de ruedas.
Orós es posiblemente el mejor restaurante de ardoz turret. su éxito se basa en ingredientes de alta calidad con un punto de realización correcto. la habitación está muy bien servida con el personal que conoce bien su oficina y quiere servir y complacer al cliente bien. la carta es bastante clásica, sin lugar para excentricidades o modernidades. el comedor es cómodo y elegante aunque con una decoración de moda pasada que no iría nada mal con una actualización completa. la más notable es su bodega. tienen muchas referencias de diferentes áreas, incluso algunas de araña. Tal vez demasiada bodega para una ciudad como la torreta. intuye la pasión con la que cabalgó y sigue manteniendo este restaurante veterano. al comensal que busca calidad sin complicaciones y puede acompañar la comida de un gran vino, Orós no lo decepcionará.
Excelente tratamiento, buena bodega y una mejor cocina.
Trato excelente,fuimos sin reserva mi mujer y yo y sin problemas. ,las croquetas muy recomendables y la salsa de la merluza exquisita,un buen postre de flan de naranja con helado regado todo con un somontano,.comida perfecta . Precio acorde a la calidad que se sirve.