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Contribuiți la feedbackSoy fan de su cerveza y fue una de las razones por las que decidimos visitar este lugar. Llegamos alrededor de las 10:00 pm y lamentablemente la cocina ya estaba cerrada, por lo que no pudimos pedir botanas. Además, la cerveza no estaba tan fría como me hubiera gustado. El precio me pareció un poco excesivo considerando que la producen ellos mismos. A eso de las 11:00 pm nos pidieron amablemente que nos retiráramos y el servicio fue regular. En mi opinión, cierran un poco temprano, pero entiendo que la ubicación pueda ser insegura. Dudo que vuelva a este lugar.
El bar situado fuera de la fábrica de Cervecería Minerva tiene un gran ventanal desde donde se pueden ver las calderas, una vista interesante. Puedes probar varias cervezas para elegir la que más te guste. Yo pedí la Colonial en botella y disfruté más poder tomarla de esta manera. También pedí una tostada de atún sobre una cama de frijoles, con un poco de aguacate y cebolla, unos tacos de camarón y una sabrosa cecina con salsa de la casa, que estaba deliciosa, aunque para mi gusto la desmenuzan demasiado. El lugar es muy agradable y la atención es bastante buena. De postre probé la nieve de tequila, totalmente diferente a todo lo que he probado, pero deliciosa.