Meson Vizcares - Tineo

Son un matrimonio amables, educados, sonrientes y lo que más me gusta es el olor a comida casera cuando entras . Había leído que aparte de las comidas que hacen que son excepcionales...Carmen elabora mojitos y no nos hemos querido ir sin probarlos... Mientras esperábamos ala elaboración del mojito nos trajo el dueño un tapeo con chorizo buenissimoooo...un queso de untar excepcional y unas croquetas...que se lo agradezco con toda el alma por ser tan generosos y buena gente... Cuando vi los mojitos alucine...que presentación tan bonita y que sabor al degustar el primer sorbo... Ya lo dicen bien ya que son exquisitos... Solo puedo dar las gracias de que haya lugares escondidos en medio de tanta belleza y que al irme hagan que las lágrimas salgan de lo más profundo de mi corazón porque sé que voy a echar de menos el tomarme el café por la mañana, el oler su comida en el fuego, y por qué sois un matrimonio de lo más buena gente que he conocido... Hasta pronto ...

Estuvimos comiendo en el Rincón y cumplía todas las normas a rajatabla,tomamos el café en Vizcares y para nuestra sorpresa, eran, la mayoría grupo de fuera de Asturias de más de 10 personas, cuando actualmente aquí no se permiten más de 6. No tengo nada más que decir, yaqqpero pagamos justos por pecadores después los hosteleros se quejan.

Pequeño mesón en el centro del pueblo junto a la propia carretera que lo atraviesa, no hay grandes ni pequeñas formalidades para comer allí, la carta consiste en un pequeño papel recién escrito por la camarera que informa de los cinco platos disponibles para elegir dentro del menú estándar de dos platos, postre, agua, vino y pan, cada menú lo cobran a 14 euros. Elegimos fabada, realmente rica si bien el caldo no estaba ligado y cabrito guisado, una buena fuente de tajadas de un cabrito muy blandito y sabroso, fue una pena que sobraran algunas, un plato excelente. El postre flojea pues no ofrecen postres caseros.

Qué maravilla de taberna con un pareja que te acogen como se debe, Carmen y Onorio. Una ensaladilla de la casa con salsa secreta de la cocinera, un buen jabalí con pimientos, postres muy buenos aunque no son caseros, un cafecito y un vasito de orujo para la digestión, todo eso por 14 €. No se lo digan a nadie...

Estabamas una semana en La Villa y comimos unas veces allí. Es como comes en la casa de tú familia. Con mucho alegría. Gracias por estas comidas asturianas auténticas deliciosas! Es una bar/ restaurante típico de la zona