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Contribuiți la feedbackSitio agradable y tranquilo para disfrutar de una buena cena. Extensa carta y comida abundante. Muy buen trato por parte de la camarera morena, muy amable y atenta en todas nuestras peticiones, una gran profesional.
Además de la sidrería, tiene en los pisos superiores unos pequeños comedores, en uno de los que estuvimos nosotros y a los que se accede por una escalera desde la sidrería, hay que destacar que dispone igualmente de un ascensor, muy útil para alguien con movilidad reducida. Nos atendió una chica muy amable, pero el servicio fue muy lento, imputable a la cocina, y eso a pesar de que, estábamos sólo tres mesas, una de ellas grande, de unas 14 personas y otras dos pequeñas, incluyendo la nuestra. Indicar que en el comedor del primer piso no había nadie, me queda la duda de saber si tuvieran más gente si tendrían más personal o el servicio sería aún más lento. En cuanto a la comida todo lo que comimos estaba bueno y con una relación calidad precio normal, si exceptuamos los carajillos que me parecieron caros. Volveré
Hoy hemos comido un menú de 13 euros siendo martes, el trato es bueno, el local está bien pero el menú yo creo que es mejorable, las cantidades sin problema pero el sabor no me dijo mucho, la paella con ese que no se pasa pierde mucho unos bocartes rellenos que quizá lleve mucho elaborarlos no aportan gran cosa.
La comida estuvo aceptable aunque no tan bien como nos habían hablado de ella. El problema llego en el postre, nos pusieron una tarta de mousse de chocolate llena de moho por dentro, con cachos verdes duros incluso, algo espantoso y que nunca antes nos había pasado. Para más sorpresa la reacción del camarero cuando se lo comunicamos fue: vaya! Quieren otro cachin????!!!! Como!?!?!?!? Ni siquiera un perdón, cuando consideramos que como mínimo deberíamos haber sido invitados a la mitad de la comida, sino a ella entera, no invitándonos ni al café ni otros postres. La persona que la comió vomitó esa misma tarde, desde luego pudo haber acabado en algo mucho más serio! No volveremos otra vez!!!!
Restaurante acogedor y con una cocina magnífica. Raciones caseras muy abundantes. El restaurante cuenta con varios comedores en distintas plantas. Los escanciadores, profesionales, algo que se agradece.