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Contribuiți la feedbackReservamos el día se San Valentín a las 22:15. Un muy buen servicio por parte de las camareras, siempre avisor pero sin atosigar. La comida espectacular, los bueñuelos de bacalao de lo mejorcito que hay en Sevilla. Pedimos 3 entrantes: Patatas bravas, brioche con pringá y mejillon. Y dos platos: los bueñuelos y el pollo con la salsa de roquefort y espárrago blanco. Dos postres, como siempre al corte, una mousse y la tarta de queso templada. Dos bebidas cada y dos servicios de pan por unos por 60 euros. La verdad que todo riquísimo y de una calidad-precio muy buena. Repetiremos siempre que queramos ir a un sitio más arreglados.
Uno de los sitios que recomiendo sin duda buenas comida buen producto y un equipo excelente que da gusto ver como trabajan. Calidad y muy muy buen precio. Sin duda un sitio a recomendar para comer de verdad en el centro de Sevilla.
Fui dos veces antes de esta reseña. Ambas sin reserva. La primera nos ubicaron en una barra que al principio fue un poco incómodo pero finalmente nos sentimos muy a gusto. Y la segunda esperamos un poco por una mesa. De todas formas recomiendo reservar. La cocina es abierta, la atención excelente y el sitio es acogedor y cálido. Las mesas están a buena distancia, la música no es demasiado fuerte y los asientos son cómodos. La comida el primer día fue excelente, realmente me fui muy emocionada de encontrar el top 1 de Sevilla para mi. Sin embargo la segunda vez no fue muy buena. Las ostras, para nada recomendables. La sopa de tomate tampoco. La tabla de queso curado está bien. En general las porciones muy pequeñas. Pero! Y por lo que si volveré: Berenjenas con miel Ajo blanco Tiramisú de setas Alcachofas fritas Volandeiras Postre de chocolate blanco, lima y hojaldre (Vale la pena aclarar que no me gusta ninguno de los dos pero si la lima y este postre está en mi top) Se agradecen tantas opciones vegetarianas. Volveré y recomiendo!
Fuimos a cenar sin reserva y algo tarde y nos atendieron de maravilla. Nos sentamos en la barra, muy cómodos, además la cocina es abierta y huele genial. Recomiendo la barra porque estás más cerca de la cocina y lo ves todo. La tosta de atún es pequeña pero exquisita. La volandeira buenísima. Los chicharrones no son de Cádiz, son más parecidos a los torreznos de Soria, pero riquísimos. Las croquetas demasiado líquidas por dentro, para mi. Buena carta y variedades de vino. Nos tomamos un mini gin de postre muy rico. Buena relación calidad-precio. Volveremos.
Estupendo!! Nos encantó. El ambiente es relajado y la comida es maravillosa. Nos gustó mucho la cocina abierta. Muy recomendable