Imagini
ContribuieNu există imagini de arătat
Recenzii
Contribuiți la feedbackLos Huamuches, situado en la carretera hacia Ocotlán, es un restaurante campestre con un ambiente familiar. El lugar está decorado con Carrizo y ofrece comida oaxaqueña auténtica. Tienen una variedad de bebidas, tanto calientes como frías, y su sazón es excelente. Desde las empanadas de flor de calabaza hasta los guías, mole y amarillo, todo es delicioso. Es el lugar perfecto para pasar un fin de semana en familia, ya que cuentan con juegos para mantener entretenidos a los niños. A veces tienen música en vivo o la actuación de payasos. Además, su servicio es excelente y se nota la experiencia que han acumulado a lo largo de los años. Sin duda, es uno de mis restaurantes favoritos y seguiré visitándolo.
En Tilcajete, la cuna de los alebrijes donde hombres y mujeres esculpen la madera de copal con el alma para crear seres oníricos de piel multicolor, también se disfruta de una gastronomía extraordinaria. Desde las 7 de la mañana, cuando los primeros rayos del sol iluminan el campo, las puertas de carrizo de este restaurante rústico se abren para dar la bienvenida a todos los visitantes. El aroma a humo de la leña que quema debajo del enorme comal se eleva hasta el techo y llena el lugar con un olor a madera quemada. En este lugar se preparan tortillas a mano, memelas, empanadas y una variedad de guisos. El servicio es increíblemente rápido, casi no tienes que esperar un minuto para ver el menú, que luego te sirven con la misma rapidez y generosidad. Puedes empezar con un chocolate atole o un chocolate caliente, acompañado de delicioso pan de San Antonino Castillo Velasco. La salsa de carne frita es siempre un acierto, servida con frijoles enteros, ensalada, grandes tortillas hechas a mano y mucha salsa. Delicioso. Personalmente, voy los domingos, aunque el restaurante está abierto de 7 de la mañana a medianoche todos los días de la semana. Es un ambiente totalmente familiar que puedes disfrutar desde el momento en que bajas de tu coche por su sencillez.
El restaurante Comedor los Huamuches, situado en la carretera a puerto ángel Km. 25, Santo Tomas Jalieza, Oaxaca; es un lugar muy agradable. La atención es sensacional, te atienden rápidamente y todos los alimentos son frescos. Preparan las tortillas en el momento, las cuales utilizan para hacer quesadillas y empanadas de amarillo, verde, flor de calabaza o champiñones. También sirven ricos frijoles recién salidos de la olla de barro, carnes asadas y platos de botana oaxaqueña. El entorno está rodeado de árboles y mucha vegetación, creando un ambiente ideal para que la familia pase un momento agradable. Además, cuentan con un área de juegos para que los niños se diviertan mientras los adultos disfrutan de deliciosas bebidas, jugos y aguas frescas después de la comida.
Si quieres conocer verdadera comida tradicional de Oaxaca, tal y como se come en las comunidades, tendrás que visitar este parador el cual es uno de los consentidos por los residentes. Soy fiel cliente de este lugar, adoro sus creaciones del comal, sobre todo sus quesadillas de flor de calabaza y para comer no me pierdo nunca la carne en salsa fruta, platillo típico muy casero del Valle de Oaxaca, es excelente! El lugar es extremadamente sencillo, con un muy bien servicio a pesar de la gran demanda que hay los fines de semana. Es un lugar familiar, con un amplio comedor, estacionamiento y a veces hasta con música en vivo, todo muy tradicional, una verdadera experiencia pueblerina.
Hace no mucho tuve que ir a la poblacion de San Jacinto Chilateca a resolver un problema con unos equipos que tenemos ahí por parte del trabajo, en teoría todo seria rápido, por estar inmerso en el problema no me di cuenta que el tiempo paso volando, ya eran las 4 de la tarde y yo sin comer. Uy dije y ahora a donde?? Como no podía mover la camioneta por el equipo que llevaba. Tome un moto taxi y le pedí me llevara a los comedores que están sobre la carretera, que me dice valla a los huamuches, ahí se come rico, bueno le dije, llévame! Y así fue, que me lleva a este pintoresco restaurante! El lugar es sencillo, nada de glamour, llegue y luego me agarre una mesa, ni bien me había sentado y llego una señorita que ya traía un platito de cacahuates, que me da todo el menú, para empezar me comí un caldo de guía, muy rico, y luego un tasajo encebollado con frijol, adicionalmente pedí un aguacate rebanado, el tasajo estaba blandito y jugoso, todo esto lo acompañe con tortillas y agua de jamaica, no había otro sabor, o era agua, refrescos o cervezas. La verdad quede muy satisfecho! El personal atiende muy rápido, tienen que hacerlo ya que había bastante gente, a pesar de que ya era un poco tarde!! De regreso a donde estaba mi vehículo lo tuve que hacer caminando, buena para bajar la comida.