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Contribuiți la feedbackBuena experiencia. eficiencia del personal, al menos la camarera que me asistió, excelente. No hay carta, hay una serie de platos y “tapas” de buena materia y muy original. el postre, supremo! el vino, era una bebida, tal vez no era mucho de mi gusto. Pero para beber, no puedes pedir mucho, lo entiendo. en resumen, ¡de acuerdo!
Fuera del restaurante no llama la atención, parece un mesón normal y ordinario, sorprendido de encontrar esta cocina en él. el excelente tratamiento es amistoso y amistoso, hicimos el menú de degustación, me encantó la atención sobre alergias o en mi caso mi situación especial, con el embarazo hay ciertas cosas que no puedo comer, porque sin problemas se adjunta el menú, grande. los platos bien presentados, original, es muy bueno, me encantó el flan de ceps. precio de calidad es genial, lo recomiendo, son platos que están en carta, sale a probarlos, son platos pequeños pero por nada que tienes hambre.
Correcto por el precio que pagas, aunque por las referencias que esperaba más; desde el menú de degustación sólo hay una pareja o tres cosas que sorprenden, el resto aunque sea bueno, son platos tradicionales con un toque diferente. Buen lugar para ir, pero no es el que sales deseando regresar al día siguiente, aunque si es para repetir. en resumen correcto, comida de calidad, precio correcto (no barato,) pero la falta de ese encanto que te cautiva en un menú de degustación. algo que destacar y que si me encantó es su carta de vino, superoriginal al mismo tiempo que la práctica, no revelaré nada más, debemos verlo. Julio 2021, segunda visita, supera la primera, muy recomendable.
Todo riquísimo. menú de degustación, están atentos, nos pidieron alergias y si algo no nos goteó y adaptó el plato. 6 platos sorpresa más 3 postres
Tienen 2 menú degustación a elegir. Són menús sorpresa elegimos el de 30€. 5 platillos y 3 postres. Canelon rebozado con salsa tropical, delicioso però algo picante. Tartar de (corball) corvina con tostadas tambien algo picante. Pero sabroso. Bocata de calamares, hmmm, mejor que en Madrid. Bacalao, lentejas y pesto, muy rico. Gyozas (empanadillas japonesas) de pie de cerdo, tambien picante. Lastima para mi gusto todo era picante aunque soportable. Postres daikiri americà, piña con miel, delícia de chocolate. Todo brutal. Servicio muy àgil y muy atentos. Una joya escondida descubierta. Tres temporadas en el Bulli esto se nota. Mis felicitaciones a todo el equipo, mencion especial al xef Roger que ha venido a ver como habia idò todo. Le he comentado lo del picante però que era suportable aunque no puedo con el picante.