Club De Playa Mantarrayas

El servicio es insuperable, el personal muy amable y carismático. Precios justos y porciones de comida muy bien servidos. Súper recomendable.

Éramos tan solo 3 personas, le pedimos amablemente a 5 meseros 3 sillas y nada hasta que uno de ellos regañó a otro por llevarse sillas para otra mesa nos las trajeron, nos mencionó el mesero que la comida tardaría 25 minutos en llegar dijimos que no era problema ERROR! Tardó exactamente 1 hr con 40 minutos en ese trayecto a la hora pedimos totopos y salsa obviamente uno tiene hambre, nos trajeron una “salsa” y pedimos de favor una salsa picada y con una cara de pocos amigos me dijo el mesero “no hay” pasó otro porque nuestro mesero desaparecía cada 20 minutos y ni quien lo viera y le dije al mesero que si no tenían tomatito picado o algo (pico de gallo) me volvió a decir en tono arrogante “no” y le dije y si quiero una salsa o algo me dijo le abro orden si quiere le mando al mesero (y como el mesero llegaba cada 20 min mejor dije que no) le dijimos que parecía que estabamos pintadas y se burlan de uno. Al final llego la comida y los camarones empanizados llegaron bien, pero el pescado de las otras dos personas con las que iba estaba mal cocido. En pocas palabras pésimo servicio la comida está equis definitivamente no vale la pena las mil horas de espera y las caras de amargados y la actitud nefasta de los empleados este lugar tiene gente por que no hay otro restaurante cerca por que de atención y servicio les falta y mucho!!

Visitamos el restaurante en semana de pascua, en el lugar tienen un perro rottweiler suelto entre las mesas, traía bozal. Aún así el perro mordió a mi papá, un adulto de la tercera edad y diabético. Jamás nos mostraron la cartilla de vacunación del perro para asegurarnos de que no tuviera rabia. Los empleados nos comentaron que el sobrino del dueño del restaurante era el dueño del perro y que no se encontraba en el lugar donde en ese momento. Les dejamos nuestro número para que se pusieran en contacto con nosotros y se hicieran responsables del daño, jamás lo hicieron. La persona del taxi nos comentó que no se la primera vez que ese perro ataca a los clientes. Es una irresponsabilidad enorme tener a un perro que ya atacó en ese lugar y que los dueños no se preocupen por los afectados, ni por los clientes. ¡Hagan algo y dejen de poner en riesgo a las personas que los visitan! Y si no les importa eso piensen que están perdiendo clientes, al menos yo ya di mi no recomendación de su restaurante a varios conocidos que han ido a Holbox

Muy rica comida excelente atención muy buen anfitrión Raúl nos atendió de lujo

Pesimo servicio, tienes que rogarles para que te puedan vender algo