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Contribuiți la feedbackMe esperaba mucho más de este local, las raciones son pobres. Pedí una hamburguesa y estaba buena pero venia sola, en todos sitios te ponen algo de acompañamiento como patatas o ensalada (8€ . Mi mujer se comió dos lonchas de jamón ibérico y dos tostadas de pan de payés (pequeñas y nos cobró 14,50€, muy caro! El postre estaba bien pero la ración era justa. Solo con que hiciesen pequeños ajustes ganarían muchos más clientes. Creo que no hace falta ser tan justo en las raciones.
Cuando buscas restaurante y lo encuentras casi todo cerrado solo tienes la opción de entrar en los pocos establecimientos que quedan abiertos. En este restaurante 'no se pueden pedir peras al olmo ': Es lo que parece. Un restaurante humilde con un menú del día muy corto y patos muy sencillos. ¡Pero al menos comes! El sabor de la comida no estaba mal, todo y la sencillez de la misma. El servicio normal. El espacio entre mesas justo.
Menú a 15€ Una pinta fatal. Únicamente tenían menú, una carne tiesa como una piedra, la patata cruda, un pelo en el postre. Lo quitaron y volvieron a servir el mismo. Vieron que dejamos el plato entero y ni tan solo preguntaron el motivo de porque no había gustado. No volvería. Hemos tirado el dinero. Nada recomendable.
Local pequeño pero acogedor, buscaba comer bien y me metí a pesar de verlo vacío (tampoco es que hubiera un ambientazo en el pueblo, salvo las terrazas, a medio llenar). Menu 11€ de comida casera. Puchero de lentejas (presentación excelente) y galta al horno. Vino de la casa muy digno. Muy muy bien por ese precio!
Buscábamos un lugar donde cenar y vimos la carta de hamburguesas que tienen en la entrada y decidimos probar. Al servirnos me dió la sensación de que eran unas hamburguesas pequeñas pero con muy buena pinta. Resultaron ser buenísimas y suficientes para llenar el estomago. Además la fora de servir el plato nos resultó muy original.