Polleria Los Abanicos - Peníscola

Entré en el local y pregunté educadamente si tenían botellas de agua pequeña. El camarero me dijo que si, y la dejó encima de la mesa. Le enseñé mi tarjeta de crédito porque era la única manera de pagar. El camarero me dijo que bien. Pero que lo que dijera su jefe. A continuación vino un señor (así canoso) y le dije educadamente que quería pagar la botella de agua. El cogió la botella de agua con la mano y la tiró con fuerza contra el mostrador y me dijo que para vender solo eso que no me vendía nada. Fue un impresentable porque en principio el camarero no me puso ninguna pega pero el subnormal de su jefe iba crecidito y me trato fatal, a pesar de haber preguntado yo con buena educación. Con un (lo siento, no aceptamos tarjetas por tan poco habría bastado) pero en lugar de eso me dijo que no le interesaba porque no ganaba dinero. El sitio era oscuro, mal ventilado y estaba muy sucio. P ara coger una infección si se come ahí dentro. Un maleducado este señor sin trato al cliente. Ojala cierren este local.

Local muy cerca de la playa pero la limpieza brilla por su ausencia... En la parrillada de carne encontré un pelo de una longitud nada similar a los de mi cabeza,aparte de que se me ve el cartón,el pelo estaba chamuscado. En fin, son 10€ de menú con sorpresa....

El peor restaurante, si es que se le puede llamar como tal, que me he cruzado. Pedimos dos menús y un plato de choricitos a la sidra. La ensalada tenía cuatro hojas de lechuga, tres aceitunas y embutido malo (esto fue el plato estrella). De primero pedimos huevos revueltos con jamón, aparentemente muy apetecible, pero lo que trajeron era una especie de tortilla medio cruda con trozitos de jamón york. Para acabar pedimos la paella, que tenia un color radiactivo y los mejillones parecían enfermos, y también pedimos carne en salsa que no estaba mal pero la salsa era literalmente agua. Finalmente el café no entraba en el menú y no se podía cambiar por el postre. Además no me sentó nada bien así que nada recomendable.

El peor sitio donde he comido en mi vida y de largo. Decir que la comida estaba mala no es hacer justicia. Estaba asquerosa. Choricillos a la sidra que provocan arcadas, platos incompletos, ensaladas 'de regalo ' que no me comería ni regaladas, el aceite de girasol y aguado y el vinagre fermentado y con espuma, pollo asado devuelto sin probar mira que es difícil no comerlo si tienes hambre , sepia que ni olía el mar junto a la playa, que dolor! . Lo mejor casi la pizza, barbacoa del Mercadona, con todo el morro. Lo mejor viene después. La cuenta a mano en un papel, con los precios que les da la gana y encima todo mal sumado a favor de la casa, por supuesto . Creo que querían cobrar al final un 20% por la cara. En fin, que muy mal de comer y encima te roban y te timan. No recomiendo pisar este sitio a nadie.

Quality and a lot of variation of everything ; very friendly and outstanding staff of your customers , I recommend