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Contribuiți la feedbackYo que quieren que les diga, me encanta este sitio. Hay quien dice que es un bar de barrio; puede ser, basicamente porque está en un barrio de Madrid; pero desde luego no estoy de acuerdo si ese adjetivo se acompaña de un gesto despectivo. Voy a Madrid por trabajo un par de veces al año y no importa en que parte de la ciudad esté o si tengo que coger 3 lineas de metro, cada años vuelvo a la Casina a comer o a cenar. No puedo ir a Madrid sin pasar por aquí. El motivo es que en este sitio me siento como en casa, tienen un menú bastante economico y sobre todo la comida es casera y estupenda, el servicio es respetuoso y acogedor, te piden el punto de la carne y te lo sirven tal y como la has pedido (para mi esto es importante y no pasa en todos los sitios). La comida está hecha con mimo, con esmero, con cariño y eso se siente en el estomago. El caldo gallego es estupendo, el pulpo espectacular, el entrecot buenisimo y no hay algo que haya probado que no me haya encantado. Buenos fondos en los gisos, se nota el chub chub de la comida, están atentos a sacar los segundos en su momento. Quizas nos puedan pacerer cosas muy básicas, pero cuando todas se juntan y se acompañan de amabilidad, sosiego y un buen precio es fantastico. Mi ultima vez ha sido en septiembre y si bien me quede sin caldo gallego porque aún hacia calor, me comi un giso de patatas con costilla que fue una delicia. Quizá nunca estén en los primeros puestos de la clasificación de Trip advisor, pero desde luego en mi siempre tendrán un cliente que cada vez que vaya a Madrid no dejará de visitarlos.
Yo de ved en cuando como en este restaurante, también en este restaurante yo he tenido celebraciones tanto familiares y el trato es excelente
Ofrecen un menú a 14,50 € que está bien, al menos el día que comimos. Lástima que el comedor sea tan pequeño que resulta agobiante cuando está lleno.
La atención de la chica de la barra (a medio día) pésima, te atiende como si te hiciese el favor de tu vida, cuando preguntas algo primero te pone mala cara y luego contesta. Además que pedí una tapa señalandola en la carta, donde viene claramente el precio, y me trajo otra ración casí 4 veces más cara, fatal, con un perdona entendí otra cosa, me hubiese valido, para nada la educación brilló por su ausencia.
Sirven medias raciones muy abundantes, como una ración en cualquier otro sitio. Muy variadas y sabrosas , el servicio muy atento y profesional. Para tomar a diario unas tapitas antes de comer o cenar, pero también tiene comedor y cocina asturiana, muy buena, probamos un montón de cosas, varias cervezas, agua y terminamos con una ración completa de callos de los que se pegan los labios todo a un precio escandalosamente barato. Lo recomiendo. Está cerca de la estación del AVE