Imagini
ContribuieNu există imagini de arătat
Rezervă acum
Recenzii
Contribuiți la feedbackFirst, this was the only restaurant we visited for the week that seemed to have a true language barrier. Their English was limited as was our Spanish. However we worked through it. The menu was limited too, and not very many options for those that do not like seafood. I will say the steak platters were very tasty as well as the tuna. All of the meals were interesting looking and the combinations seemed a little odd, if that makes sense (never eaten Peruvian so it may be normal), but all tasted good and glad that we went outside our comfort zone. Happy experience. Highlights were the salad dressing, chicken appetizers, plantain chips and steak. The staff was so accommodating it was almost embarrassing. If we drank half a glass of water, they would rush over and refill it. We had 3 waiters for our table it seemed. Felt like royalty, especially since we had dinner early and the place was mostly empty. The decor was okay but get a table by the huge windows and you won't be disappointed with the lagoon views.
Dined at this restaurant while on vacation with my family. Excellent seafood (the scallop appetizer is a must!). We shared a few dishes among the three of us, and every one of them was very good.
Lo mejor de este restaurante es la atención de su personal, que es de 11. La comida es muy buena aunque le falta un toque de perfección, como por ejemplo usar papas para freír. Los ceviches son excelentes, al igual que las pastas y las carnes de alta calidad que están muy bien preparadas. También las bebidas típicas son deliciosas y refrescantes. No llegamos a probar los postres debido a lo bien servidos que estaban los platillos. Los precios son acordes a la zona, que suele ser un poco alta. Es un lugar que definitivamente vale la pena visitar.
Muy buena comida, igual a la auténtica comida Peruana, excelente atención, la vista muy bonita y el sabor incomparable, sin duda será mi restaurant favorito en Cancun.
Haciendo um recorrido por todo el Perú quedé maravillado por su gastronomía y su cultura en general. Al regresar a Cancún me dió un golpe de nostalgia y decidí salir a cenar con unos amigos canadienses a éste restaurante. Como Chef y Gastrónomo me encontré con un lugar bellísimo. Con una vista inmejorable, me tocó ver el atardecer, los chicos del sevicio muy atentos y expertos en su menú. Muy buenas bebidas, cabe mencionar que tienen IncaCola, una verdadera bebida popular peruana. Los platillos fueron desde ceviches, ensaladas, Lomo Salteado, Chifas, y por supuesto su majestad el Aji de Gallina. Que presentaciones, que sazón, que lugarsazo. Terminé pidiendo hablar con el Chef quien es peruano y quedamos como buenos amigos. Un lugat 100 % recomendable si se quiere pasar una velada romántica a lado de la laguna Nichupté y cenando exquisita cocina peruana.