Nineteen - Barcelona

Un lugar pequeño y exclusivo, con un ambiente sumamente tranquilo y sereno que invita a conversar pausadamente mientras se disfruta de una de las mejores experiencias culinarias que he tenido en Barcelona. En particular, mi esposa pidió el exquisito pollo relleno de cebolla confitada con patata violeta, mientras que yo opté por el Marmitaco de Atún. Ambos platos estaban deliciosos, de una calidad excepcional que refleja la maestría del chef. El servicio brindado por el camarero fue destacable, mostrando atención al detalle al conseguirme pan sin gluten, gesto que aprecié enormemente y, por cierto, ¡estaba delicioso! Para culminar esta experiencia gastronómica, decidimos probar la tarta de queso azul, la cual se destacó por su sabor y presentación, realmente espectacular y fuera de este mundo. 100 puntos a todo el equipo de trabajo y felicitar al hotel Olivia Plaza por su dedicación en ofrecer una experiencia culinaria maravillosa, acompañada de un ambiente excepcional.

Nos dejemos llevar por las recomendaciones y fue un acierto, queríamos una cena romántica y tranquila y así fue, el ambiente era relajado y muy íntimo. La comida un acierto, todo buenísimo. Nos encantaron las croquetas de jamón! El personal nos trato muy bien!

Hemos ido a cenar en pareja y la verdad es que no tengo ninguna crítica negativa, el servicio ha sido uno de los mejores, si no el mejor, que he recibido por parte de todos los camareros/as. La comida ha sido exquisita, hemos pedido como entrantes las vieiras y las croquetas de pato y de platos principales la sopa de tomate con remolacha y los calamares rellenos, cada uno de los platos es completamente recomendable. Por último, el lugar es genial, un ambiente muy agradable y tranquilo. ¡Repetiremos sin duda!

¡Excelente servicio! ¡La comida deliciosa! Fuimos a celebrar el cumpleaños de mi pareja y nos hicieron un pequeño detalle para soplar las velas. Recomiendo el menú degustación. Fran nos brindó una atención muy cálida. Salimos muy contentos.

Esta noche mi pareja y yo fuimos a cenar y encontramos un lugar espectacular para una cena tranquila con productos de calidad. La atención fue excepcional, ¡sin duda volveremos! Probamos las patatas bravas (estaban bien, pero al final son solo patatas), luego el calamar relleno (delicioso), el solomillo de ternera (increíble) y de postre arroz con leche (nos encantó) y tarta de queso (buena, pero el queso era bastante fuerte para mi gusto). Gracias por la atención de los camareros.