Cafeteria Verge Del Lluch - Alzira

Fuimos a almorzar 4 amigos un sabado por la mañana, el sitio, como siempre, muy agradable, sobre todo en esta época en la que los días son preciosos. Uno de los comensales es celíaco, se lo indicó para que le adecuase la comida, y el amigo Ricardo le sorprendió, ya que dispone de pan para celíacos, cerveza sin gluten,....nuestro amigo quedó super satisfecho ya que según nos contó no es nada habitual. Así que ya sabéis, un aliciente más para visitar este emblemático bar de Alzira!!

Estando en Alzira y en verano, la verdad es que este local ofrece una muy buena opción para hacer una cena sencilla y rica, en una terraza en lo alto de la ciudad en la que suele correr un viento interesante para las noches calurosas. El amigo Ricardo ofrece, además de un trato fantástico, unas tapas y bocatas, muy ricas para esos días en los que no te apetece meterte en casa. Recomendable el bocadillo de sardinas ahumadas con francesa y tomate!!!

No tenían ensalada, aceitunas ni gindillas. Pedí un bocadillo sin mayonesa y menlo sirvieron CON mayonesa. Cada ve que queríamos algo pedirlo 3 veces. Lentos No me ha gustado

Hemos almorzado como cada sábado y descubrimos que el café había cambiado de dueño. Este cambio resultó ser horrible. Uno de nuestros lugares favoritos se ha convertido en un lugar al que no volveremos. La atención y el servicio no fueron profesionales. Pedimos 2 cafés con leche cada uno y en ambas ocasiones los tuvieron que llevarse porque estaban fríos. A nuestros amigos les cobraron un extra por una cerveza que él no pidió, y el camarero no corrigió este error, cobrando el extra de todos modos. Nuestros amigos tampoco encontraron los bocadillos muy buenos. Así que no vale la pena gastar dinero en este lugar. Recomendaría llevar tus propios bocadillos y hacer un picnic si quieres disfrutar de la zona, que es preciosa. Desde nuestro punto de vista, no lo recomendaríamos.

Esta cafetería ha cambiado de dueños y nuestra primera experiencia con los nuevos dueños ha sido un desastre. Hoy hacía frío y no tenían llaves para bajar los toldos. Al final un cliente ha tenido que romper los candados porque hacía un aire imposible que no se podía estar y nadie de la plantilla daba una solución. Por lo que respecta al servicio, muy lento. El almuerzo, pasable. Y los cafés con leche nos los han servido fríos dos veces. Hay que decir que se los han llevado y nos han servido otros ya calientes. En general la experiencia no ha sido para nada agradable. Una lástima porque vinimos muy a gusto a esta cafetería. Ya veremos si cuando pasen los meses aprenden y mejoran. Dejaremos passar el tiempo, pero por ahora no funcionan bien.