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Contribuiți la feedbackUn lugar muy agradable para disfrutar de un buen rato. Está decorado de manera muy acogedora. El personal es muy atento. Las llegadas fueron todas increíbles, aunque tal vez en la calidad de la carne podrían mejorar un poco. La relación calidad-precio es correcta; si mejoraran la carne, ganarían mucho más.
Lugar muy agradable, decorado con buen gusto y que aporta un aire fresco a la plaza de la Moral en comparación con la oferta existente hasta ahora. Pedimos varias cosas para compartir y pasamos una noche excelente. Destacamos la burrata, las langostas en tempura y el muelle. Desde Soy Muy Dulce, quería probar uno de los pasteles (de chocolate) y estaba muy rico. Volveré a desayunar y probaré el resto, ya que todo tenía un aspecto muy apetitoso. El personal era muy amable y atento en todo momento, especialmente el gerente, quien se aseguraba de pasar mesa por mesa para comprobar que todo estuviera a gusto de los clientes. En general, una excelente relación calidad-precio; un restaurante que no decepciona, visita muy recomendada.
En nuestra búsqueda de lugares con un encanto especial en Madrid, encontramos este gran sitio ubicado en la zona de La Moraleja. La decoración es cuidada, el personal es muy atento y la ubicación es inmejorable. Para compartir, decidimos pedir una berenjena, gyozas y ensaladillas. Como plato principal, elegimos un par de melocotones y una ensalada. Para terminar, tres cafés (no pedimos postre). La verdad es que, en general, todo estaba bastante bueno y, para el área en la que estábamos, pagamos un poco más de 90€. Sin duda, volveremos para probar muchos platos que nos quedaron con ganas de disfrutar.