Mabel Alcazar Sl.

Un buen sitio donde comer, junto al Carrefour, deliciosa comida,, tienen un menú del día por 12 euros mas bebida, esta todo genial, por poner una pega, estaba un poco salada la comida, pero chapo. el postre un majar, un postre típico, no recuerdo el nombre, pero llevaba torta de alcázar, helado, y bañado con chocolate caliente, muy bueno

Pedimos el menú y nos entregaron una hojita con dos primeros y tres segundos. Visto lo visto nos pasamos a la carta. Opino sobre mis platos: Un primero de pulpo a la brasa, consistente en un trozo de unos 7 CMS con muchas patatas. Un segundo de bacalao en salsa, consistente bb en una colita de unos 10 CMS con mucho pisto y un exceso de relleno para que se vea el plato lleno. El postre normalito. Total aprox. unos 35€, bebida aparte Creo que es una tomadura de pelo, no me verán más por ahí.

Hemos ido a la prueba de menú de boda y está todo tan exquisito que cuesta mucho decidir, los aperitivos fríos destacar el langostino con mahonesa de semillas y las bolitas de foie, los aperitivos calientes ricas baritas de verduras, los cócteles de bienvenida riquísima la piña y cada mohito, los entrantes riquísimo el calamar pues era tierno y salsa buenísima, la ensalada de salmón y pepino, los pescados una innovación el pez espada con salsa de washabi, el bacalao con holandesa excepcional y los sorbetes cabe destacar el de manzana distinto y rico y las carnes muy Buena calidad en cuanto a los postres buenísimos cada uno y un acierto la bizcochada muy típica y rica

Fuimos un grupo de amigos pensando que sería una comida de batalla debido a la gran cantidad de comidas que daban, pero nuestra sorpresa fue bastante grata ya que tanto el servicio como la comida estuvieron a gran altura. Por ser comida de trabajo y con prisas, tomamos el menú, pero los comentarios de la gente que estaba allí eran muy positivos respecto a la calidad y el servicio. Volveremos con mas tiempo

Comimos el pasado día 3 de mayo, el menú de 11 euros. ¡Sencillamente espectacular¡ Muy bien atendidos. Platos cocinados con imaginación y buen saber y hacer. Es la tercera vez que vamos y aunque nos desviamos unos cuantos kilómetros, merece la pena. Continuar, por favor, en esa línea ascendente.