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Contribuiți la feedbackSimplemente genial, imagina por un momentos las olas del mar chocando con las rocas, tú sentado al aire libre degustando comida vegetariana. Más tarde una clase de yoga o alguno de sus talleres... ¡pura vida! Sólo hay una pega pero está compensada: tardan en traer la comida y según la estación no está todo disponible pero la hacen a la vista, sin recalentar, y aprovechando todo lo de temporada. Vale la pena disfrutar de esta experiencia
Pura Vida vuelve a la alimentación de nuestros orígenes, utilizando productos ecológicos, artesanos, comida fresca, de la zona y temporada. Es lo que muchos hoy denominan slow food o “comida de mercado”. Por ello habrá platos que si puedan tener una continuidad en nuestra carta y otros muchos que no, dependiendo del producto que se tenga día a día y con la imperiosa y creativa necesidad de tener que innovar platos cada día.
Ayer descubrimos Pura Vida. Debo decir que fue una sorpresa para mi pareja y para mí encontrar un chiringuito de construcción artesanal y con...
Sitio encantador con comida exquisita y saludable. Es un lugar al que ir sin prisas y disfrutar del entorno y ambiente. Volveremos seguro
La clase de yoga bien, el sitio con encanto, los zumos MUY MAL. Nos traen la carta al tiempo que nos dicen que no tienen nada ?¿ , ilusa de mí, le...